viernes, 8 de agosto de 2008

An ¡Ay! for an ¡Ay!

Cuando vi "Benny´s Video" de Michael Haneke, me quedé un poco estupefacta.
Si ya con ser un filme del "terrorista cerebral" basta para eso, mi sorpresa fue aún más grande al ver que era tal cual el mismo caso de "Julio Castrillón", quien en Enero del 2002 escandalizó a todo Monterrey por el homicidio de su puberta amiga Ana Nassar.
En ese entonces Julio era un adolescente de 16 años de edad.


"Benny´s Video", sin embargo, se filmó 10 años antes que "Julín" hiciera el remake.
Y aunque dudo que la cinta haya sido su musa inspiradora, es increíble la coincidencia de ambas historias.

"Para Benny de 14 años, cualquier cosa grabada en video es mucho mejor y más real que lo que puede ver con sus propios ojos.
Sus padres profesionistas casi no le ponen atención, y pasa la mayor parte del tiempo ya sea viendo videos salvajes violentos, o viendo afuera de su ventana por medio de su cámara de video. Un día, en un capricho, invita a una chica a su casa y la mata mientras su cámara de video lo grababa. Entonces esconde el cuerpo temporalmente en su clóset y se va de fiesta. La manera calmada y apacible en la que sus padres discuten la situación cuando él se las explica, usando el video para demostrarlo, deja claro que su psicopatología tiene un trasfondo en la de sus propios padres".
-Clarke Fountain, All Movie Guide, New York Times.

Fuera del testimonio en video; el crimen, el criminal, y el encubrimiento paternal, son similares.

Cuando aquél caso salió a la luz, se comenzó a indagar más sobre el responsable.
Y testimonios aseguraban que "Julín", ya había dado muestras de su patología anteriormente; una de sus maestras recordaba que ya había sido expulsado del colegio por matar de una manera muy violenta y cruel a un tlacuache (AKA zarigüeya) enfrente de otros niños durante un recreo.
(Curiosamente "Benny" en la película, aunque no mataba tlacuaches, está obsesionado con un video casero donde se ve como sacrifican a un cerdo con una pistola).


Me acordé del "Julín", porque esta semana estuve leyendo sobre el sonado caso del mexicano José Ernesto Medellín Rojas, quien fue ejecutado por medio de la inyección letal el pasado 5 de Agosto, en Huntsville, Texas.

A sus 18 años José Medellín, fue condenado a pena de muerte por violar tumultuariamente y estrangular a las adolescentes Jennifer Ertman y Elizabeth Peña en junio de 1993, junto con miembros de su pandilla.

"El 24 de junio de 1993 por la noche caminaban de regreso a sus hogares desde el apartamento de una amiga cuando se toparon con un grupo de cinco jóvenes, miembros de una pandilla llamada los Black and Whites. Éstos habían estado bebiendo y llevando a cabo una ceremonia de iniciación de un nuevo miembro. Los acompañaban tres hermanos que no formaban parte de la pandilla.

Los pandilleros detuvieron a las niñas por la fuerza. En un principio Jennifer logró zafarse y corrió, pero su amiga Elizabeth le pidió auxilio a gritos por lo que regresó. Los jóvenes aseguraron así a las dos y empezaron a violarlas. Algunos policías que más tarde investigaron el caso describirían las tumultuarias violaciones, por las heridas que los pandilleros dejaron en los cuerpos de las víctimas, como las más violentas que jamás habían visto.

En ningún momento hubo menos de dos pandilleros sobre cada una de las niñas. Las violaciones fueron orales, anales y vaginales. Uno de los pandilleros se vanagloriaba de haber sacado “sangre virgen”. Las niñas fueron salvaje y repetidamente golpeadas por los pandilleros. A Jennifer le tiraron dos dientes de los golpes.

La violación terminó después de una hora por agotamiento de los pandilleros. Las víctimas estaban convertidas en verdaderas piltrafas. Pero la pesadilla no terminó. Dos de los agresores empezaron a estrangular a Jennifer con un cinturón: cada uno tiraba de un extremo. Como el cinturón se rompió, utilizaron las agujetas de ella para terminar su labor. “La puta no se moría”, declaró posteriormente Joe Medellín, uno de los asesinos. Elizabeth suplicó después que no la mataran, pero también la estrangularon con sus agujetas.

Los pandilleros siguieron pateando y pisoteando a las niñas para asegurarse que estuvieran muertas. A Jennifer le rompieron dos costillas a patadas, pero la necropsia revelaría que ya para entonces no estaba sufriendo."
-Sergio Sarmiento, Las Víctimas. 9 de Abril 2008.

Disculpen lo Gore, pero la descripción de los hechos a veces es necesaria para tener una idea clara de la saña con la que se llevaron a cabo.

Hay algo que une a Julio Castrillón con Joe Medellín, que no es precisamente ni la inicial de su nombre, ni un acuso de homicidio.

Al estar leyendo sobre el caso Medellín, me topé con un testimonio de su abuela, Doña Eleuteria Almendariz, quien en una entrevista, recordaba algunas anécdotas de la infancia de su nietecito:

"Le gustaba descabezar hormigas. Se sentaban aquí -en donde estaba un hormiguero de hormigas coloradas- a descabezar las hormigas. Y cuando llovía –porque todavía no pavimentaban y se hacían charcos-, salían aquí y se llenaban las bolsas de ‘tepocatas’. Yo les decía, métanse pa´dentro, y él nomás me decía ‘mire mamá lo que traigo’; Eran "tepocatas" y se las arrancaban todas".

Hmmmm....

So..., le gustaba descabezar hormigas y ranas.
Era de esos que encuentran recreativo y complaciente el maltrato animal.
Curioso, ¿eh?, porque tanto Jeffrey Dahmer "El Carnicero de Milwaukee", David Berkowitz "El Hijo de Sam", e Ian Brady "El Asesino del Páramo", por mencionar algunos, compartían un historial de abuso animal antes de practicar con personas.

Pero bueno, el tema en cuestión no se vuelca hacia qué hacían en su infancia los casos de sociópatas, sino qué hacer con ellos después.

Estos últimos días los medios han hablado mucho sobre la pena de muerte.
En conjunto con el aumento este año de un 35% en los casos de secuestro en el país, y el caso del plagio a Fernando Martí, ha causado una gran indignación general y hecho que la opinión pública y el congreso comiencen a considerar aplicar la pena capital para los secuestradores (sociópatas).

Mucho se discute sobre la pena de muerte, los Derechos Humanos, y Amnistía Internacional constantemente reclaman que la condena recae de manera desproporcionada sobre minorías y pobres.
Estoy de acuerdo.
Y sobre todo si es un caso turbio, dudosamente comprobable, lleno de confusión, y con pistas que no concuerdan; no es buena ejecutar al supuesto responsable.

¿Pero que hay cuando un caso de homicidio es totalmente intencional, violento en extremo, y los cargos son asumidos, comprobados, y más que aceptados por quien los cometió? (y encima sin muestras de arrepentimiento).

Hmmmm....

A parte de su anterior columna gore de "las víctimas", me pareció interesante otro punto que tiene Sergio Sarmiento al respecto:

"La pena de muerte no tiene sentido como instrumento de rehabilitación de un criminal o como forma de persuadir a los criminales de que no cometan ciertos delitos. Para eso simplemente no funciona. Pero sí puede servir para cumplir con ese principio de justicia que desde tiempo inmemorial ha declarado que el castigo debe ser equiparable al crimen y que, "si hubiere muerte, entonces pagarás vida por vida".
Vida por vida, Sergio Sarmiento. 5 Agosto 2008.


Y cita a la Biblia:
"Mas si hubiere muerte, entonces pagarás vida por vida, diente por diente, ojo por ojo, mano por mano, pie por pie, quemadura por quemadura, herida por herida, golpe por golpe".
Éxodo 21:23-25, Antiguo Testamento.

Es como menciona Stuat Walton en su "Historia de las Emociones":

"Se diría que la justicia es una delicada flor que, si no se cuida con esmero, puede agostarse y perder su atractivo. La esperanza utópica en el ideal de la justicia se cifra en la esperanza de corregir todo mal y contribuir con ello a su definitiva erradicación. Con este fin quienes contravienen la ley deben pagar públicamente un precio por haber subvertido el orden moral".

Hmmmm.... ¿Así que lo traemos por default?.

Bueno, pero dejando al lado ese instinto de venganza y castigo innato en el ser humano, pero si dejar de enfocarnos en sus recovecos mentales, me encontré con con un post donde de entrevistaban a dos psicólogos infantiles respecto al caso de Anthony Tyrone Terrell Jr., otro más de un adolescente a quien su corta edad le basta para cometer actos atroces. Terrel, originario de Georgia, en el pasado mes de Marzo disparó y mató a su mamá y a sus dos hermanas de 11 y 4 años.

Al respecto, hablando de los pequeños sociópatas uno de los doctores entrevistados afirma:

"Para sus familias, estos muchachos parecían normales sin ninguna evidencia de patologías, pero los signos de advertencia siempre estuvieron ahí".
"Los niños que demuestran un comportamiento de trastorno antisocial deben de ser tratados a una edad temprana como lo son los 4 años, ya que para cuando llegan a la adolescencia, generalmente ya es muy tarde. Es intratable".


Eso me hizo recordar una plática que tuve hace mucho con una amiga psicóloga.
Estaba discutiendo sobre los diferentes trastornos mentales, me comentaba sobre los trastornos de personalidad y sus posibles tratamientos. Al llegar a los del
trastorno límite de la personalidad , sólo dijo. "Uy!, esos como dijera mi maestro: esos no se les controlan hasta que se mueren".

"En general, el tratamiento es difícil y la impresión es que estos trastornos son intratables o que requieren de varios años de terapia para obtener resultados muy limitados".
Cambios en la psicopatología del trastorno limítrofe de la personalidad, en los pacientes tratados con psicoterapia psicodinámica
-Asociación Psicoanalítica Mexicana, A.C..

Hmmm....
Está bien, no estoy diciendo que todos los limítrofes sean sociópatas y viceversa; ni mucho menos que se comience un exterminio.
Pero, en ciertos casos... tal parece que
Dios, la ciencia, y la lógica estuvieran a favor de la pena de muerte.
¿No creen?


Pero claro, siendo realistas, y dado a que nuestro sistema judicial está tan corrupto, la pena de muerte
en este país se prestaría a ajustes de cuentas personales.

Me pregunto si entonces, tal vez una emasculación y una lobotomía bastarían para reincorporarlos a la sociedad, ¡Ja!


Btw... ¿Estás criando a un sociópata?

Si tu pequeño demonio muestra rasgos de:
  • Piromanía
  • Crueldad animal
  • Se orina en la cama y dura más de lo normal
  • Total falta de consciencia, empatía o compasión por los demás
  • Haraganería
  • Miente, manipula y tiene un comportamiento engañoso
  • Falta de remordimiento e indiferencia
  • Rehuye a muestras físicas de afecto como lo son los abrazos
  • Vandalismo a propiedades
  • Escritos o dibujos extraños que muestran violencia contra la mujer
  • Comportamiento Violento
  • Comportamiento sexual inapropiado
  • Necesidad de buscar una gratificación inmediata
¡Enjáulalo y llévalo corriendo a tu psiquiatra más cercano!.

Gran e Importante Posdata:

Quiero hacer una diferencia importante, entre Psicópata, y Sociópata.

Psicópata: Contiene el prefijo psico, derivado del griego (fijxo) que significa “alma” o “actividad. mental”,
y d
e patología." del griego logos (estudio), y paethothos (daño o sufrimiento), que es según
la definición de la RAE:


patología.
(
De pato- y -logía).
1. f. Parte de la medicina que estudia las enfermedades.

Por lo que un psicópata es meramente un enfermo mental en cualquiera de sus variaciones, que sin profundizar mucho en el tema, va desde una depresión (que bueno, todos habremos de ser psicópatas alguna vez en la vida, ¿no?), hasta aquel loco indigente que mendiga por la calle.

En cambio el sociópata conoce bien lo que es bueno y lo que no lo es dentro de una sociedad. Se comporta con tanta sinceridad que hace pensar a los demás que cree en los valores humanos. Son francamente intratables, al grado de que algunos leen libros de psicología con tal de imitar las conductas del esquizofrénico. Como sea posible tratan de manipular a sus captores o a los terapeutas.

En pocas palabras, y para que me entiendan de una vez, no se puede llamar de la misma manera a John Nash en "Mente Brillante" (esquizoide y "psicópata" en el sentido literal de la palabra), que a Alex en "La Naranja Mecánica" (sociópata).

No hay que confundir y mal emplear los términos.














1 comentario:

Jose Garmendia dijo...

Huitzilopoztli no dijo busquen una aguila devorando una serpiente, dale otra leida al texto original de la Leyenda de Tenochtitlan, si la encuentras o si encuentras algun codice original.